¿Cuántas veces renegamos en casa porque nadie vuelve a llenar las cubeteras? A todos nos gusta disfrutar en un buen vaso de bebida fresca, un trago para las tardes de verano. ¡No puede faltar el hielo! Tenemos la solución para que nunca vuelva a faltar el hielo en cubos. Te contamos sobre la fábrica de hielo: qué es y cómo funciona.
Basta de encontrar la cubetera vacía. Bebidas frescas siempre en cuestión de segundos y de manera divertida. Y por si esto fuera poco, también podés tener tu fábrica de hielo para uso comercial. ¿Querés saber más? ¡Leé la nota!
Comprá tu fábrica de hielo
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Qué es una fábrica de hielo
Una fábrica de hielo es ese tipo de electrodomésticos que no sabías cuánto necesitabas hasta que te decidiste a comprarlo. El hielo es un componente infaltable de la mesa familiar, especialmente en verano pero la verdad es que lo necesitás en cualquier época del año.
En pocas palabras, una fábrica de hielo es un electrodoméstico que te permite transformar agua en cubos congelados. En cuestión de minutos podés tener en tu mesa cubitos de hielo para enfriar tus bebidas, o para guardar en el freezer y utilizarlos cuando quieras.
Sin tener que esperar mucho tiempo hasta que se congele, y sin tener que recurrir al kiosco para comprar el hielo en bolsa.
Algunas heladeras tienen el sistema incorporado en sus puertas o en su freezer, pero la mayoría no. También, las que tienen esta funcionalidad son un poco más costosas. En cambio, la fábrica de hielo no sólo es más económica que cambiar tu heladera, sino que además podés cambiarla de lugar. No es tan portátil como una conservadora pero es bastante fácil de trasladar.
¿Cómo funciona una fábrica de hielo?
El sistema de una fábrica de hielo es bastante sencillo. En principio, tiene una entrada de agua. Esta se deposita en una bandeja con la forma que se desea dar al hielo. En general, son cubos o pequeños cilindros. Hay que tener en cuenta que las de uso doméstico producen unidades más chicas que las que podés comprar en un negocio.
El interior de la fábrica se encuentra a temperatura muy baja. Por lo tanto, el agua que está depositada en la bandeja se va congelando por capas hasta quedar solamente en estado sólido: cubos de hielo.
Luego, la temperatura de la bandeja aumenta un poco para que los cubos se desprendan y se depositen en la bandeja exterior o extraible. Y ya están listos para consumo, y la fábrica a punto para ser utilizada nuevamente.
¿Qué tan rentable es una fábrica de hielo?
La rentabilidad de un negocio depende de varios factores. Si vamos a considerar los insumos que necesitás y la inversión inicial, podemos decir que no es un mal punto de partida. Sólo necesitás adquirir la fábrica, y el único insumo requerido es el agua.
Ahora bien, también debés evaluar la demanda del producto. Si vivís en un lugar en donde hay pocos negocios y altas temperaturas tenés sin dudas, mejores perspectivas que si estás en localidades donde generalmente hace frío, o estás en medio de un centro comercial con mucha competencia.
También tenés que tener en cuenta que además de la fabricación, necesitás considerar los pasos siguientes: envasado, almacenamiento y distribución, en especial si tenés en mente trabajar con negocios, bares y restaurantes.
De todos modos, si estás pensando en dar tus primeros pasos en el mundo de los negocios o ya tenés uno y estás buscando expandir tus horizontes, es una buena opción. Una inversión baja con poco margen de pérdida que puede llevarte a encontrar un camino de crecimiento inesperado.
¿Cuánto tarda una máquina de hielo?
Sin dudas podemos decir que el tiempo de fabricación del hielo con la máquina es significativamente menor a dejar las cubeteras en el freezer. En general, el ciclo de fabricación de hielo en una máquina estándar es de 6 a 13 minutos. No obstante, influyen algunos factores como la temperatura del agua, el tamaño del cubo o unidad de hielo, la temperatura ambiente y el tiempo que lleva encendida la máquina.
En términos generales, podemos decir que podés fabricar hasta 12 kilos de hielo en 24 horas.
Modelos de fábrica de hielo
1- Máquina de hielo modular
Lo que caracteriza a estas máquinas es que se trata de módulos, por tanto es apilable sobre el depósito de hielo o sobre otras superficies, y los módulos se pueden apilar y separar entre sí.
El depósito de almacenamiento donde caen los cubos de hielo recién hechos está separado del resto de la máquina. Además, puede traer varias bandejas con diferentes capacidades de almacenamiento. Este diseño hace que sea más fácil de limpiar.
Vienen de diferentes tamaños y permite fabricar distintos volúmenes de hielo de acuerdo a lo que se necesite.
2- Máquinas de hielo autónomas
A diferencia del modelo anterior, todas las partes de la fábrica constituyen una unidad. La ventaja es que de esta manera, se ocupa menos espacio. Pero, por otro lado, tienen menos capacidad de almacenamiento que las modulares.
Es una buena opción cuando disponemos de poco lugar para instalarla.
3- Máquinas de hielo bajo mostrador
Estas se pueden colocar perfectamente bajo una mesada. Son óptimas para espacios muy reducidos. El lado negativo es que tienen mucha menos capacidad de almacenamiento por lo que si necesitás mucho hielo, necesitás repetir el procedimiento unas cuantas veces. No demanda gran esfuerzo pero sí genera consumo energético.
Entonces, ¿conviene tener una fábrica de hielo?
Todo lo que contribuye a hacer la vida más simple y feliz, conviene. Y una fábrica de hielo te permite tener hielo en tus vasos cuando lo desees, con una mínima inversión de recursos y esfuerzo. No importa si es verano y querés unos batidos al lado de la pileta, o si tenés una fiesta de muchos invitados en pleno invierno. El hielo siempre es bien recibido.
Entonces, si querés evitar la incomodidad de recurrir a las viejas cubeteras, tener en casa una fábrica de hielo es una excelente decisión. Y, si te gusta siempre ir por un poco más, podés convertirlo en un rentable negocio para dar tus primeros pasos como empresario, o para complementar un emprendimiento que ya tengas.